domingo, 8 de agosto de 2010

Los mejores días de agosto

¡Menudo fin de semana! si empezamos a contar desde el Miércoles...

El miércoles por la noche, al final acabamos todos en Benidorm, y no se por qué sigo llendo si lo odio. Porque a Benidorm solo se puede ir en estado comatoso y aceptando que vas a tener que huir de peluqueras y ciclados... sin embargo, en el fondo algo de cariño le guardo al lugar por las mil y una historias que guardan en secreto sus calles. Lo que pasa en Benidorm se queda en Benidorm.

Si de algo me he dado cuenta este fin de semana es de que lo importante es la compañía y no el lugar en donde estés. Me he tumbado en la playa a mirar las estrellas más de una noche en compañía de nuestro amigo Queen Margot, sin nisiquiera entrar a ningun garito y me lo he pasado mejor que en la mejor discoteca.

El Jueves fui a ver a Mayma a Denia y lo que en principio iba a ser un dia y una noche se convirtieron en 3 días increíbles de locura. He conocido a gente genial, con la que he encontrado una complicidad increíble y me he reído como hacía tiempo. Cómo me gusta que la playa de Denia tenga tan pocas luces que las estrellas se ven perfectas... algo que echamos tanto de menos en Madrid... que ya ni nos acrodábamos de lo que eran.

Pero ayer fue el gran día sin duda. El único día del verano en el que realmente hay fiesta en Altea. Y cómo les gusta a los de la Comunidad Valenciana la pirotecnia... todo es una excusa para tirar petardos o fuegos artificiales. Las fiestas de la Olla de Altea no son una excepción. Sin embargo se han convertido en los más impresionantes que he visto en mi vida, saliendo desde el agua y tan grandes que parece que se te caen encima (si Mayma, es una metáfora, no lo decía de verdad jajaja).

Y luego a beber hasta perder el sentido y a encontrarse con muchísima gente (incluidos aquellos que no quieres ver y tienes que saludar taaaaan falsamente. Es un pueblo, es lo que tiene...) y cuando te quieres dar cuenta ya son las 5 y pico y empieza la rave... para aquellos que quieren continuar, con dj acantilado y vistas al mar. Lo más gracioso de todo es no darte cuenta de donde estás, que amanezca, girarte y ver cómo la inmensidad del mar se rinde a tus pies. Y no querer que la fiesta termine nunca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario